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Por Lucía Rodríguez Astronium graveolens La madera del Ron-ron (Astronium graveolens) es muy pesada o excesivamente pesada con un peso especifico básico mayor de 0.86, la densidad de esta madera es muy variable, pero en una misma muestra, las partes oscuras siempre son las más densas. En condición fresca, la albura es de color café claro-grisáceo o café oscuro amarillento, mientras que el duramen es desde naranja grisáceo, café rojizo hasta rojo brillante con bandas de irregular grosor, y de tono café medio hasta muy intenso. Después de expuesta a la luz y al aire, esta madera se torna café rojiza o rojiza oscura con vetas casi negras (Marín & Flores, 2002)[1]. El ron-ron es excelente para hacer muebles finos, gabinetes, piezas torneadas, pisos, parquet, artículos deportivos, contrachapados, mangos de herramientas, construcción pesada y construcción en general, siendo apta para múltiples usos decorativos. La velocidad de secado es moderada y puede presentar pequeñas rajaduras o agrietamientos en los extremos durante el secado. El grano de esta madera es variable, de recto a entrecruzado, con bandas anchas, la textura es fina y homogénea, el lustre regular o elevado. La figura de esta madera es muy bella y llamativa con líneas verticales de color pardo rojizo oscuro o negruzcas, anchas o angostas y con espaciamiento irregular. Aunque (Astronium graveolens) es una madera de densidad muy alta, esta no presenta dificultad para trabajarla. Es fácil de aserrar, cepillar y pintar. Se logra obtener un buen acabado liso y un buen pulimento natural. No es fácil de engomar y pegar. El peso de la madera verde es de 1120 Kg. /m3 (2469 libras/m3), con un contenido de humedad de 50.2 %. Las propiedades mecánicas, de esta madera son de medianas a altas, es una madera fuerte, capaz de sustituir por su dureza, al cocobolo (Dalbergia retusa) y al Brazilian rosewood (Dalbergia nigra [Vell.]). El ron-ron es una madera bastante resistente al ataque de insectos y hongos siempre y cuando no este en contacto con el suelo (Flores & Obando)[2]. El Ron-ron (Astronium graveolens), crece desde el sur de México, toda Centroamérica, y parte de Sur América, hasta Brasil y Bolivia. En Costa Rica se encuentra a lo largo de la costa Pacífica, desde Guanacaste hasta la zona sur en la Península de Osa; además se encuentra en la Región de Upala y Los Chiles en la zona norte. La especie crece en elevaciones que van desde el nivel del mar hasta unos 1000m (3280.84 pies), se le puede encontrar sobre sitios planos o con pendientes moderadas en sitios inclusive rocosos, siendo por lo tanto poco exigente de suelos. Es un árbol hasta de unos 30m (98.4 pies) de altura y unos 80cm (2.6 pies) de diámetro. En los bosques secos normalmente, alcanza el dosel y es caducifolio, en los bosques húmedos es más escaso. El fuste es cilíndrico y a veces ramificado a baja altura, la corteza es de color gris claro, brillante, se exfolia en pequeñas placas circulares y presenta gambas poco desarrolladas. La floración ocurre entre diciembre a marzo y los frutos se colectan del árbol entre febrero a mayo. En Costa Rica se han realizado algunas experiencias en plantaciones con esta especie y se reportan crecimientos de mediano a lento, con una supervivencia alta. Ocasionalmente la especie tiende a ramificarse, por lo que es importante la ejecución de podas a temprana edad. (Jiménez, Q et all, 2002).[3]
[1] W.A. Marin & E. M. Flores, in Tropical Trees Seed Manual, USDA, Forest Service, Agriculture Handbook 721, October 2002. 311-313 [2] Flores, E. & Obando, G. Árboles del Trópico húmedo. Importancia socioeconómica. Editorial Tecnológica de CR. 2003. 922p. [3] Jiménez, Q. et all. Árboles maderables de Costa Rica, Ecología y Silvicultura. Editorial Inbio y E. Tecnológica de CR., 2002. 361p. |
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